Resumen 'Star Wars: Operacion Renacimiento'

El cómic STAR WARS: OPERACION RENACIMIENTO, lleva un tiempo de parón.

Hagamos un resumen general de lo que llevamos hasta ahora:

Dorian Tarr es un agente de la Nueva Republica. Un tipo de aspecto desaliñado, de porte serio, poco sociable, sin amigos... Pero el mejor en su trabajo.
Contratado por Mon Mothma y Lando Calrissian, su primera mision es introducirse en una carcel de Kessel, con un elaborado plan en el que el Escuadron Pícaro de Wedge Antilles atacará los generadores de escudo despues de que sea encerrado, se liberará y atacará por sorpresa al administrador de la prisión, para sacarle informacion sobre una trasmision que la Nueva Republica interceptó sobre un proyecto imperial al que llaman Proyecto Renacimiento.

Tras saber que los primeros pasos del Remanente Imperial es en Naboo, Tarr se dirige alli, pero en la ciudad de Theed no encuentra movimiento imperial. Tras informarse en Palacio, coge una moto swoop y se dirige a los pantanos y al bosque. Encuentra rastro imperial bajo el acantilado donde está situado el palacio. Estan haciendo unas excavaciones, donde ya han abierto un extenso tunel.

Sigilosamente se introduce hasta el fondo, donde el tunel termina en una pared rocosa donde han abierto una brecha. Ve salir a dos almirantes imperiales, una camilla, y guardias imperiales custodiandolo. Cuando se alejan, entra en la brecha abierta y descubre que no hay nada. Pero las paredes son de hormigon y hay ileras de iluminacion que van hacia arriba, sin verse el final. Sin saberlo, se encuentra en los reactores de energia del palacio.
Cuando es descubierto, y tras un intenso tiroteo, logra saber, a traves de uno de los almirantes antes de su ultimo aliento, que éstos forman un grupo al que entre las filas imperiales se les conoce como el Consejo de los 7. Se reunen de vez en cuando para tratar temas de repartición de tropas, compra de armamento, expansiones y conquistas de planetas...
Tarr corre a por el otro, pero cuando sale de la cueva se encuentra con la lanzadera clase lambda despegando y perdiendose en el cielo.

Sin tener ni idea de donde continuar, Tarr se dirigió a Tatooine para recabar información. Si hay algun lugar en la galaxia donde quieras tener informacion sobre contrabando e ilegalidad, ese es Tatooine. Seguro que la whiphid Lady Valarian, señora del crimen desde que falta Jabba, sabe algo, asi que se dirige hacia su hotel-casino, el Lucky Despot.
Pero Valarian asegura que no sabe nada, aunque se descubra que es un farol: cierra el casino y escapa, dejandolo a merced de sus matones, que se encontraban en la cantina tomando un trago. Tras librarse de ellos, la sigue hasta un hangar, donde imperiales cargan cajones repletos de armas en las lanzaderas.


La whiphid habia mentido. Estaba pasando armas de contrabando al Resto. Y precisamente con quien habia cerrado el trato era integrante del Consejo de los 7.
Éste, se sube a uno de los robots de carga y enfrenta a Tarr, pero logra vencerlo al hacer explotar la maquina estrellando una caja que movió con la Fuerza.

Todos se quedan atonitos. ¡Tarr es un Jedi!

La whiphid intentaba escapar, pero logra agarrarla y sacarle informacion sobre el proximo movimiento del Consejo de los 7. Le dice que Sullust, pero jura que no sabe nada mas. Tarr la deja que huya con vida...

Sullust esta en espacio imperial. La Nueva Republica aún no ha librado a Sullust del yuzgo del Imperio. Para lograr aterrizar en el planeta deberá ir en una nave imperial, asi que usa una de las que estaban en el hangar de Tatooine. En la ciudad, parece ser que debe ser muy importante, pues en la planza principal donde hay edificios laboratorios estan muy bien custodiados, y será imposible entrar de frente. Asi que entra por los tejados, llegando de edificio en edificio y colandose por los conductos de ventilación.
Una vez dentro, intenta avanzar sigilosamente, pero todo parece vacio. Cuando atravesaba una habitación, se cierran las puertas y atenuan las luces. A traves de una cristalera se asoman dos almirantes tambien del Consejo de los 7. Y le hablan por un interfono. Le tienen reservada una sorpresa.
Una mesa de operaciones en esa misma habitacion comienza a levantarse, revelando quien estaba tumbado en ella: Darth Maul.

Maul era el Proyecto Renacimiento. Maul era a quien buscaban en el tunel abierto bajo Palacio. Pero solo tenian la mitad de arriba, asi que le implantaron unas terrorificas piernas bionicas.
Maul abre los ojos, y siente a Tarr, y su furia es tal contra los jedis que se enzarzan en un imbatible duelo. Suerte que Tarr tiene su propio sable laser, aunque prefiere no usarlo (mas adelante se ve mediante flashbacks el porque rechaza usar la Fuerza y ser un Jedi)

El duelo los lleva por todo el laboratorio, hasta unos inmensos hangares donde estaban repostados destructores estelares, preparados para encender motores. Maul tambien tiene ayuda de uno de los dos imperiales de antes, el mitad ciborg, que montado en un AT-ST dispara proyectiles, lo que aprovecha Maul para librarse de Tarr y montar en uno de los destructores.
Tarr corta el AT-ST por la mitad con el sable laser, imperial incluido. Corre rapidamente hasta un destructor imperial y antes de que cierre se introduce en él.

Las naves saltan al hiperespacio. De momento Tarr prefiere permanecer escondido y descansar, ademas asi vería hacia donde se dirigen.
Horas despues, Tarr despierta por el ajetreo y bullicio. Parece que han llegado a su destino y se ha comenzado a desembarcar las naves de tropas. Tarr mira por una ventana y ve el planeta sobre el que estan situados: Yavin IV.

El Consejo de los 7 tiene planeado atacar la Academia Jedi de Luke Skywalker, con Darth Maul a la cabeza de sus tropas de asalto. Dorian se introduce en una capsula de escape y se deja caer en el planeta, pero cae muy lejos.
Maul llega hasta enfrente a la Academia Jedi, donde los jedis, sabiendo del ataque, estan en guardia, haciendo un escudo humano para que no pasen, y dentro tambien estan todos alerta.
Una encarnizada batalla comienza en esa explanada, antes de que logren destruir un muro y entren en la Academia.
Tarr tiene que darse prisa si quiere llegar al templo. La cuenta atras ha comenzado, y casi no hay tiempo...